lunes, 23 de abril de 2007

Canon de un pasajero aburrido

Hay dos tipos de personas: las que se levantan del asiento para dejar que uno pase tranquilo hacia el lugar libre; las que corren las rodillas e insinúan "dale que tenés lugar de sobra, ladilla".

3 comentarios:

eresfea dijo...

Uy, escribiría una novela de las disputas de posabrazos...

Natilla dijo...

jaja! Eresfea si querés material yo tengo de mis épocas de adolescente cuando viajaba todos los días a Montevideo. Y por supuesto que hay más de esos dos pasajeros. Está el que se sienta al lado tuyo y chismorrotea con el de atrás (y se entera todo el ómnibus de la conversación), el que te pide que le cambies el asiento para ir sentado con alguien, el que se hace el dormido para no sentirse culpable si se sube una embarazada... y más (por vergüenza no explicito qué tipo de pasajeras éramos mi amiga y yo).

Al Nonino dijo...

Si lo buscás bien, Natilla, todas esas categorías de personas se pueden clasificar dentro de las que yo digo.
En cuanto a los bondys, me causa mucha mucha mucha gracia ver a la gente que tiene sueño. No encuentran posición, y siempre corren riesgo de desnucarse. Apasionante. También digno de novelar.