viernes, 22 de febrero de 2008

USA/11

No avisé (disculpen) que ya no estoy en Amherst: nos occidentalizamos hacia Tucson, Arizona, una ciudad universitaria y cactásica. Los cactus crecen en las montañas como sombrillas sin sombra, y ya me es difícil recordar la intensidad de los colores caribeños que alguna vez archivé en la mente: ahora el mundo es de un marrón que seca la boca, con encías que se pegan por el polvo.

6 comentarios:

@sirbuntalot dijo...

Mandale un abrazo a Rod Tidwell. Y otro para vos.

P.D.: ¿Nunca estudias?

Al Nonino dijo...

Todos los días, de 8 a 5 de la tarde. Ahora en Tucson va a ser un poco más light... Pero igual nos tienen al palo. Abrazo.

Anónimo dijo...

Brillante foto.

Al Nonino dijo...

No es mía... pero para el próximo post cuelgo alguna...

eresfea dijo...

Escupe, escupe...

Al Nonino dijo...

Hay apuntes pero no hay tiempo...